martes, 23 de febrero de 2016

La Gallinaza Como Fertilizante


La industria avícola, debido a su producción  intensiva tiene el potencial de proveer además de huevo y carne, materiales de desecho orgánico y de calidad como la gallinaza. Este material tiene grandes ventajas para incrementar la producción de los cultivos, entre las más importantes están: el aporte de nutrientes como N, P y K, e incremento de la materia orgánica del suelo. Debe aclararse que en este artículo se habla de gallinaza y no de pollinaza (no son sinónimos), por lo que es conveniente definirlas:

  • Gallinaza. Excretas de gallinas ponedoras que se acumulan durante la etapa de producción de huevo o bien durante periodos de desarrollo de este tipo de aves, mezclado con desperdicios de alimento y plumas. Puede o no considerarse la mezcla con los materiales de la cama.

  • Pollinaza. Excretas de aves de engorda (carne), desde su inicio hasta su salida a mercado, mezclado con desperdicio de alimento, plumas y materiales usados como cama.


Cómo se define la cantidad y calidad de gallinaza que se produce?

La cantidad y calidad de la gallinaza está influenciada por los siguientes factores:

·       Edad del ave. La cantidad de excretas está relacionada con el tamaño del ave, al ser un ave pequeña, la cantidad de excretas disminuye, contrario a lo que pasaría con aves de mayor edad, donde la cantidad de excretas será mayor.

·    Línea  de  producción.  Según  la  línea  de  producción  que  se  siga  el  manejo  es  distinto, particularmente en la composición del alimento, lo que finalmente se refleja en la calidad y cantidad de las excretas de las aves (contenido nutrimental). Es importante tener como referencia que aproximadamente por cada kilogramo de alimento consumido, la aves producen de 1.1 a 1.2 kg de excretas frescas (70 – 80 % de humedad en gallinaza).

·  Consumo de alimento. La cantidad de excretas depende de la cantidad de alimento consumido, tomando en cuenta su digestibilidad.

·      Cantidad  de  alimento  desperdiciado.  La  composición  química  del  alimento  utilizado  en  la industria  avícola  se  encuentra  relacionada  con  la  calidad  de  la  gallinaza.  Al  desperdiciar alimento y ser depositado en la superficie donde se encuentran las excretas, enriquecerá a la gallinaza (principalmente nitrógeno), dependiendo de la cantidad desaprovechada.

·   Cantidad de plumas. Las plumas en su estructura química contienen queratina, dicha proteína tiene como componente principal el nitrógeno  por lo cual, a medida que existe más cantidad de plumas la gallinaza mejora su calidad nutrimental.

·  Temperatura. Alta temperatura y humedad generan gases, principalmente amoniaco, resultado de la fermentación anaeróbica, perdiendo de esta forma grandes cantidades de nitrógeno (gallinaza de baja calidad).

·   Ventilación. El flujo de aire en la gallinaza reduce la perdida de N causada por su volatilización en forma de amoniaco.

Aporte nutrimental de la gallinaza

La gallinaza es un excelente fertilizante si se utiliza de manera correcta. Es un material con buen aporte de nitrógeno, además de fósforo, potasio, calcio, magnesio, azufre y algunos micronutrientes. Su aplicación al suelo también aumenta la materia orgánica, fertilidad y calidad del suelo.

Como ya se ha indicado, la calidad de la gallinaza y su potencial en el aporte de nutrientes depende de varios factores. Lo ideal es que antes de utilizar la gallinaza como fuente de nutrientes, se procure analizarla en un laboratorio de confianza. Al contar con un análisis químico robusto se puede conocer el aporte real esperado de un material en particular, además es una guía para definir la dosis de aplicación.  La  gallinaza  en  comparación  con  otros  abonos  orgánicos  tiene  un  mayor  aporte nutrimental, en el siguiente cuadro puede observarse un ejemplo.

triente
Estiércol de bovino
Gallinaza
kg/ ton
Nitrógeno
14.2
34.7
Fósforo (P2O5)
14.6
30.8
Potasio (K2O)
34.1
20.9
Calcio
36.8
61.2
Magnesio
7.1
8.3
Sodio
5.1
5.6
Sales solubles
50
56
Materia ornica
510
700

  
Cabe  destacar  que  la  gallinaza  es también uno de los abonos orgánicos con  mayor  tasa  de  mineralización. Esto  la  hace  una  excelente  fuente para el aporte de nitrógeno a los cultivos,  pues  tan  solo  en  tres semanas el nitrógeno orgánico de la gallinaza se mineraliza en un 75 % aproximadamente. Por citar un ejemplo: si aplicáramos 10 toneladas de gallinaza con  80 % de materia seca (8 ton), 4 % de N (320 kg de N orgánico), y con un 75 % de mineralización, tendríamos un aporte de 240 kg de N disponible para el cultivo.


Una de las grandes cuestiones al aplicar gallinaza, es si el fósforo que contiene está inmediatamente disponible para los cultivos. En este sentido, un estudio realizado por el Dr. Castellanos en 1986, donde cultivando alfalfa en macetas hizo cuatro diferentes aportes de fósforo utilizando tres diferentes fuentes, entre ellas la gallinaza. Los resultados indican  que  las  plantas  aprovechan de la misma manera cualquier fuente de fósforo.

Prácticas de manejo de la gallinaza

Para   que   la   gallinaza   sea   un   fertilizante   orgánico   eficiente   se   deben   seguir   las   siguientes recomendaciones:

a.    Evitar que la humedad del material sea elevada, la ventilación  es  un  factor  a  considerar  si  se  desea obtener un abono rico en nutrientes.

b.    El  secado  de  las  excretas  en  zonas  específicas donde se puede proteger de la lluvia, es un aspecto importante. Además se debe considerar un correcto acomodo; la forma de pirámide es la más utilizada ya que permite un mejor escurrimiento. Si se desea disminuir el tiempo de secado se recomienda extenderlas sobre una superficie.



 Bibliografía

Tiquia,  S.M.;  Tamb,  N.F.Y.  2001.  Characterization and  Composting of  Poultry  Litter  in  Forced-Aeration Piles.  Process
Biochemistry 37: 869 – 880.

Zhang, H.; Hamilton, D.W.; Britton, J.G. 2004. Using Poultry Litter as Fertilizer. Oklahoma Cooperative Extension. 4p.

Zublena, J.P.; Barker, J.C.; Carter, T.A. 1997. Poultry Manure as a Fertilizer Source. North Carolina State University. Raleigh, NC. 14 p.